En el año 2054 el crimen se puede predecir y condenar a los culpables antes que cometan el delito. Un sistema perfecto que nunca ha fallado, hasta que uno de sus miembros se torna el sospechoso de la desaparición de su propio hijo.
En el año 2054 el crimen se puede predecir y condenar a los culpables antes que cometan el delito. Un sistema perfecto que nunca ha fallado, hasta que uno de sus miembros se torna el sospechoso de la desaparición de su propio hijo.